La insoportable levedad de ser...Ramoncín

Anoche, justo después de dos copas de Barbadillo, tres cervezas y un gin-kas poco cargado me enteré de la "agria polémica" suscitada en torno a estos dos monstruos (cada uno por motivos diferentes) de la música española: Ramoncín y Sabina. Como no quería pecar de indocumentado, me he estado informando para luego despacharme a gusto.

Para empezar, me parece una gilipollez que Ramoncín hiciera esa apreciación acerca del nombre de la gira de Sabina. Supongo que de alguna manera tendrá que ganarse el sueldo que la SGAE (Sociedad de Gorrones Atracadores y Estúpidos) le proporciona, ya que lo que es por recaudación de conciertos, no creo que saque demasiado.
A cada uno lo suyo, a Ramoncín basura(y mucha) y a Sabina una colleja por entrar al trapo. Sobre todo de una manera tan poco imaginativa: a través del Tomate y con una expresión tan estudiada como "ese es más tonto y no nace". A ver, que yo también lo pienso, pero de un tío que hace un soneto semanal para una revista de actualidad esperamos algo un poco más elaborado, no? Lo que está más que demostrado es que Ramoncín se basta y se sobra para desautorizarse, y que ya es una caricatura de sí mismo desde hace tiempo. Así que, mejor dejarle con lo que tiene el hombre, que ya tiene bastante.
Por cierto, y ya de paso, cuando Sabina decía eso de que en esto de la piratería "los que más pierden son los que más ganan" no debería olvidar que él mismo está en ese saco... un poquito de autocrítica de vez en cuando tampoco viene mal, y los "intelectuales rojillos" de la postguerra hace mucho que dejaron de ser los abanderados del obrero... o no?

Resumiendo, estoy francamente perplejo... francamente perplejo ante la parrafada que me acabo de cascar con el pedazo de resaca que tengo (va a ser que el gin-kas no estaba tan flojito...)

F.A.S.P. (Frikis, Aunque Sobradamente Perfumados)

Hoy no podía faltar una entrada, porque hoy... es el DÍA DEL ORGULLO FRIKI!!!!

Efectivamente, bajo la iniciativa de un tío americano muy cachondo los frikis del mundo mostramos este año por primera vez nuestro orgullo por serlo.
Algunos se empeñan en enfrentar los términos "frikismo" y "glamour" pero no se dan cuenta de que el uno no existiría sin el otro... acaso se diferencia mucho esto de esto?

Defenderemos nuestros derechos como coleccionistas inadaptados hasta que nuestros PV (puntos vitales) se agoten o dejen de vender cartas de Magic (lo que suceda antes), ahí va una recopilación de ellos extraídos de la página arriba linkada:

DERECHOS IN-ALIEN-ABLES DEL FRIKI

1.-Derecho a ser más friki.
2.-Derecho a quedarse en casa.
3.-Derecho a no tener pareja y ser virgen hasta la edad que sea
3.1- Derecho a, si tiene pareja, intentar convertirla en friki.
4.-Derecho a no gustarnos el futbol ni el deporte en general.
5.-Derecho a la asociación friki.
6.-Derecho a tener pocos amigos (o ninguno).
6.1-Derecho a tener todos los amigos frikis que se quieran.
7.-Derecho a no ir a la moda (una camiseta de Homer es ir siempre de moda) .
8.-Derecho al sobrepeso y a la miopía.
9.-Derecho a exhibir el propio frikismo.
10.-Derecho a dominar el Mundo.

Sólo queda gritar muy fuerte:
Frikis, animaos a salir del Telepizza y mostrad los efectos de la comida basura al populacho!
NERD POWER!!!!!! (DOMINAREMOS EL MUNDO)

Vera cousin, blood rising

Ya está aquí. Ya me ha llegado. El calentón primaveral me brota todos los años como una erupción cutánea debida a una reacción alérgica inexplicable. Alergia a la soledad, supongo.
No me voy a poner trascendental porque esto es en realidad bastante mundano.... y el caso es que no soy el único... verdad chicos? a que me entendéis? no será que el ser humano también sufre de cierta hibernación en las funciones que más atañen a la conservación de su propia especie?
Gracias al cielo Dios, en su infinita sabiduría, creó las colecciones primavera-verano para impedir que la humanidad se extinguiera. Me pregunto si a las chicas también les ocurrirá lo mismo... si alguna sigue leyendo (y no ha dejado de leer cuando se ha dado cuenta de que esto no es más que una forma bonita de decir que estoy muy salido) podría responder en los comentarios. La verdad es que tengo curiosidad...
Por último, un dato revelador: si pones buscar imágenes en el Google con la palabra "margarita" podréis ver que aparecen muchas más bebidas a base de tequila que flores invitando a ser deshojadas a ritmo del clásico "mequierenomequiere"; inquietante... ¿verdad?

Poseso, que he despertado del letargo (si es que he llegado a dormirme alguna vez...).

Memorias (de pez)

Como si de un truco de magia se tratara, voy a contaros la historia de mi vida con sólo dos frases muy escuetas (pronunciadas seguidamente una de la otra más de una vez por más de una chica):
"- jo, Palo... eres más majo...."
"-¡¡¡¡Pili!!!! ¿ has visto cómo está ese?"
Generalmente la primera se dirige a mí. Lamentablemente, la segunda suele hacer referencia a alguien que pasa, a lo lejos, detrás de mí.
Voilá!

Inapetentia Suma

Lo sé, estoy un poco vago con esto de actualizar el blog, pero hoy lo he pensado y no es culpa mía: la culpa es de la sociedad. "Yo soy muy vago porque el mundo me ha hecho así", que podría cantar Jeanette (si es que sigue viva).
El mundo en que vivimos nos hace cada día más vagos. Conseguir lo que queremos nos cuesta cada vez menos esfuerzo. ¿Cuántos teléfonos te sabías de memoria cuando tenías 16 años? ¿cuántos te sabes ahora? (no vale el 11888 ni derivados) la agenda del móvil es lo que tiene... ¿Te acuerdas de la última vez en que te levantaste del sillón para cambiar de canal? yo tampoco: Dios bendiga al descubridor de los infrarrojos. Ya no tenemos ni que sostener el móvil con la mano, porque nos podemos colgar un accesorio bluetooth en la orejita y arreglao!
Os voy a hacer una confesión para que os hagáis a la idea de lo vago que soy: cuando envío algo a imprimir en mi oficina no me levanto de la silla, sino que aprovecho que tiene ruedas para impulsarme todavía sentado hasta llegar a la impresora, recojo el papel y me vuelvo a impulsar hasta mi mesa. ¿soy o no soy el más vago del mundo?
Y es que, cada vez hay que trabajar menos para conseguir lo que queremos.